Conferencia de Neville Goddard – Fecha: 16-07-1969
El tema de esta noche es: Muchas mansiones. Quizás esté familiarizado con el tema del capítulo 14 del libro de Juan: “No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. En la casa de mi Padre hay muchas moradas. Si no fuera así, ¿os habría dicho que os voy a preparar un lugar? Y cuando yo me vaya, vendré otra vez y os tomaré conmigo, para que donde yo esté, vosotros también estéis”. (Juan 14:1-3, traducción de Moffatt) Ahora, ¿quién es éste que habla? Las Escrituras nos dicen que es Jesucristo. El capítulo lo afirma.
Arthur Chamber, que ganó el Premio Nobel de Literatura [Editor. Nota: No encontramos ningún registro de tal premio.], dijo: “Se necesita una gran imaginación para seguir a Jesucristo, y a mí, por mi parte, me ha faltado esa imaginación”. Al menos era lo suficientemente grande como para confesarlo. He conocido a muchos, cuando comienzas a discutir sobre las Escrituras con ellos, siempre te hacen una pregunta simple: “¿Has leído el Nuevo Testamento en griego?” Bueno, mi confesión es siempre: “No, no leo ni puedo leer griego”. Luego, por supuesto, tienen esa actitud desdeñosa: “¡Bueno, entonces no lo has leído en griego! ¿No es extraño?
Esto sucedió hace apenas tres meses y dije que esa es una de las preguntas que me hizo Aldous Huxley. Lo leyó en griego. Le dije lo que le dije a este señor que me preguntó: “¿No es peculiar? Aldous lo leyó en griego del original. Lo leíste en griego en el original”. (En este siglo él es realmente el mejor. Ahora se ha ido de este mundo.) Le dije: “Sabes, Aldous, lo lees en griego y lo lees en inglés, y aún así no lo entiendes. ” Entonces me preguntas: ¿lo he leído en griego? No, no puedo leerlo en griego, pero lo leí en inglés y lo entiendo. Entiéndelo porque yo lo he experimentado y tú no. Bueno, la última vez que me hicieron esa pregunta fue hace tres meses. Se quedó perfectamente quieto después de que le dije: “No lo entiendes”. Entonces, ¿qué hizo su griego?
Así que esta noche profundizaremos en este gran misterio, porque es un misterio. Pablo usa la palabra “misterio” con respecto a esta historia de Cristo no menos de veintitantos veces. Dijo: “Grande es el misterio. . .” A lo largo de sus cartas habla del misterio. No es historia, porque la historia no es un misterio; es simplemente un registro de los hechos. Bueno, este no es un registro de hechos de naturaleza secular, porque la Biblia no es historia secular. Es la historia de la salvación.
Entonces, ¿de qué se habla aquí de estas “mansiones”? Son estados. Todos los estados son eternos y existen ahora. Todos los estados existen en la Imaginación humana, y la Imaginación humana es el Señor Jesucristo. Ese es Dios. No hay otro Dios. ¡Y todas las cosas existen en él ahora!
Tenemos que hacer el ajuste: piensa en un número infinito de estados – todo lo que te puedas imaginar – ya existe ahora. El hombre pasa a través de estados, como un viajero que pasa a través de lugares, a través de ciudades. Bueno, el hombre que está pasando por un estado, como el viajero que está pasando por un lugar, podría suponer que el lugar por el que acaba de pasar ya no existe, así como un hombre que pasa por un estado podría pensar que ese estado por el que ha pasado ya no existe. ¿No sería tonto que cuando me vaya de esta ciudad, crea que porque me he ido, la ciudad ha dejado de existir? Así, los estados permanecen para que cualquiera pueda ocuparlos, y cuando se encuentran en ellos, parecieran ser la única realidad y todo lo demás en el mundo pareciera ser una mera sombra. Cuando tú entras en una ciudad o en un estado, ese estado parece ser la única sustancia. Pero todos los estados en el mundo existen ahora.
El primer acto creativo grabado en las Escrituras es el segundo verso del primer capítulo de Génesis: y el Espíritu de Dios se movió…”. Todo lo que toma lugar es ese movimiento dentro de Dios. Y Dios es tu propia maravillosa imaginación humana. Así que todo lo que toma lugar es simplemente un movimiento dentro de Dios. ¿Cómo se mueve él ahora? Ése es el secreto; como entrar en estos estados y hacerlos realidad, darles vida en nuestro mundo. Es un proceso muy simple – muy simple – pero tú y yo debemos actuar para poder hacerlo. No se realizará por sí mismo; nosotros debemos hacerlo.
Cuando nos movemos a un estado y nos vestimos de ese estado, entonces el estado toma un tono externo y se materializa ante nuestra vista, tal como está habitación está ahora materializada porque estamos en ella. Todos estos estados son tan reales como esta habitación, una vez que los ocupamos. Así que: “En la casa de mi padre hay muchas moradas”, innumerables moradas. “Si no fuera así, ¿les hubiese dicho que iré a preparar un lugar para vosotros? Y cuando vaya, vendré otra vez y os tomaré conmigo; para que donde yo estoy, allí estéis también vosotros.” (Juan 14:1-3)
Mientras estoy parado aquí, mi ajuste, es solo en mi imaginación. Yo no camino hacia algún lado – no viajo hacia él. Yo tan solo lo ajusto aquí: cierro mis ojos a lo obvio, y luego asumo que está aquí, y me visto a mí mismo con la realidad del estado de mi elección. Ahora, abro mis ojos en esta habitación y esta habitación niega la realidad de lo que acabo de hacer en mi imaginación. Pero espera, tan solo ¡espera! No puedo olvidarlo, y no puedo borrarlo. Tomará lugar. Pero, ¿por qué no lo recuerdo? Cada efecto natural en este mundo tiene una causa espiritual, y no natural. La causa natural tan solo es lo que aparenta; es un delirio de la memoria vegetal pereciente. La memoria del hombre se desvanece, y cuando es confrontado con su propia cosecha, él no la reconoce.
Él niega que en algún momento en el tiempo, él entretuvo vívidamente, con emoción, tales cosas que ahora están sucediendo en su mundo, porque su memoria se desvanece y él no lo recuerda. Así que él cuestiona la ley (si alguna vez escuchó sobre ella). Él pregunta: ¿Cómo me puede suceder esto? (¿No han escuchado eso una y otra vez?); o seguro han escuchado la declaración: “¿Por qué le ha sucedido a él? Él es muy bueno. Es un hombre íntegro y maravilloso, ¿por qué le ha sucedido eso?”
Esta es una pregunta que escuché antes de irme de Los Ángeles: “¿Por qué estas cosas deberían sucederle a Papá y a Mamá? Ciertamente tú lo sabes, por sobre todas las personas, que ellos no lo merecen.” No es un tema de merecer. Estos son estados. En algún momento en el tiempo, ellos entretuvieron esto con sentimiento, con intenso sentimiento, y luego estas cosas sucedieron. Y ellos podrían juzgar a alguien que ha tenido una condición similar, y asociar esa condición a alguna característica desagradable que conocen de esa persona y pensar que esa fue la venganza de Dios.
Aun así, ellos iban fervientemente a la iglesia, eran miembros de la iglesia. Uno está en el gremio del Altar; el otro es el administrador de la iglesia. Él es un banquero de profesión. Ellos son realmente devotos al servicio de la iglesia. Bueno, qué tiene que ver eso con entretener estas emociones con sentimiento, intenso sentimiento, y luego olvidarlo, sin conocer que el efecto (cuando toma lugar – y es un efecto natural y real) está relacionado a una causa espiritual, y la causa espiritual es nada más que un movimiento dentro de ellos mismos. Dentro de ellos mismos se mueven, y habiéndose movido, van a proyectar ese estado en el cual han caído, ya sea sabiamente o imprudentemente. Y cuando aparezca en el mundo para ser reconocido, ellos no lo reconocen como su propia cosecha. Pero no hay otra manera en que eso pueda venir al mundo.
Así que, “el Espíritu de Dios se movió…” y luego el mundo entero comenzó a aparecer. Él se movió. El movimiento puede ser detectado solo por un cambio de posición relacionado a otro objeto. Si en este preciso momento fuéramos lanzados hacia el espacio, todos juntos en el mismo movimiento, yo no podría darme cuenta, y tú tampoco, que nos estaríamos moviendo. Solo puedo detectar movimiento si puedo observar un movimiento en relación a un objeto que parece estar inmóvil relativo a mí. Tengo que tener un marco de referencia contrario a lo que muevo.
Así que, el marco de referencia sería: yo estoy parado aquí – tengo un marco de referencia. Yo tengo amigos que saben (o creen que saben) en dónde estoy parado en el mundo. Ellos creen que saben lo que yo amparo, cómo vivo, y eso es lo que ellos creen. Bueno, en el ojo de mi mente yo veo ese marco de referencia, y luego dejo que me vean diferente. Yo no me fui a ningún lado – yo permití que me vean diferentemente. Bueno, si ellos me ven diferentemente, entonces yo debo haberme movido. Entonces, en el ojo de mi mente, yo construyo una escena implicando el cumplimiento de mi sueño, y luego mientras lo veo, lo acepto como verdad y creo que ellos lo han aceptado como verdad sobre mí. Así que lo cambio. Si yo lo cambio dentro de mí y uso a ese marco de referencia, y eso mismo revela un cambio en mí, bueno entonces, yo me he movido. Ese es el secreto de toda la creación en el mundo: “Y el Espíritu de Dios se movió…”. Y en el minuto en que Él se movió, las cosas aparecieron. “Hágase la luz.”
Deja que todo lo que implique que esto exista, aparezca ahora en mi mundo, porque la potencia está en su implicación. Bueno, ¿qué implica este movimiento? Implica que ahora ellos ven en mí, lo que yo quisiera que ellos vieran. Cuando ellos me ven bajo esa luz, yo en realidad estoy diciendo (sin usar palabras): “Hágase la luz en esto, ahora. Deja que aparezca en el mundo, para que todo el mundo lo vea.” ¿Qué vean qué? Que vean el movimiento que he producido dentro de mí. Porque cuando se nos dijo: “El espíritu de Dios se movió”, eso no es más que tú propia maravillosa imaginación humana moviéndose en relación a un marco de referencia, entonces tú te mueves.
¿Cómo se nos enseña esto en las Escrituras? Se nos enseña de la manera más hermosa. Se nos lo cuenta en la forma de una historia. Estas no son historias seculares; estas son verdades profundas.
Rebeca concibió; quedó embarazada. Isaac, oró para que se le dé un hijo a su esposa – que se le dé un varón – y el Señor respondió, como se nos dijo, y ella concibió.
Luego, cuando había un problema dentro de su vientre, ella se preguntó: ¿Por qué estas cosas suceden? Si esto es así, ¿por qué yo debo vivir?, dado a que había un conflicto dentro de ella. Y el Señor le dijo: “Dos naciones hay en tu vientre, y dos pueblos se dividirán en tus entrañas, uno será más fuerte que el otro, y el mayor servirá al menor”. (Esto se nos dice en el capítulo 25 del libro de Génesis). La historia se desarrolla, y el que vino segundo, no tiene pelo. Su nombre es Jacob, que significa “suplantador”. Él suplanta, toma el lugar del otro. El que salió primero estaba cubierto de pelo por todo su cuerpo. Él se llama Esaú. Jacob lo suplanta con la decepción. Él engaña a su padre, haciéndole creer que es su hijo Esaú. ¿Cómo lo hizo? Se vistió a sí mismo con pelo y vino a su padre, y su padre le dijo: “Tu voz es la voz de Jacob”.
Ven, acércate, para que te pueda sentir”, porque el padre estaba ciego. Isaac estaba ciego, no podía ver. Así que él se acercó, lo suficiente como para que el padre lo sintiera, y le dijo: “La voz es la voz de Jacob, pero las manos son las manos de Esaú”, y entonces lo bendijo. Y cuando lo bendijo le dio el derecho de nacimiento que le pertenece al primer hijo. Cuando el primer hijo volvió de la caza, trayendo lo que el padre le había pedido – carne de venado – le preguntó: ¿Quién eres? Él dijo: “Soy tu hijo Esaú”. “Bueno”, dijo Isaac, “yo acabo de bendecir a mi hijo Esaú”. Le respondió: “Ese era Jacob”, el engañador. (Esta es la segunda vez que lo había engañado). Luego el padre le dijo, “Yo lo he bendecido, y no puedo quitarle la bendición. Tú tendrás que servirle a él.”
Bueno, ahora cuenta esa historia y ¿qué significa? Aquí está mi Esaú. Tú eres mi Esaú. Esta habitación es Esaú. Esto es más fuerte que mi estado subjetivo. ¿Cuánto más fuerte? Para mí esto es lo más fuerte: yo estoy aquí, y todo en mi mundo que pueda tocar y ver ahora y sentir. Esto es el fuerte, fuerte hijo – mi superficie. ¿Qué es el estado subjetivo? Puedo hacer una descripción visual, pero eso no es real. Pero lo voy a hacer real. Así que, yo cierro mis ojos y – cerrando mis ojos a los hechos de la vida, las cosas obvias – yo estoy ciego. Así como Isaac era ciego. Yo cierro mis ojos; yo no lo veo. Luego, persuadiendome que soy aquello que quisiera ser, y no lo que la razón y mis sentidos me dicen que soy. Bueno, en ese estado proyectado, yo me visto a mí mismo con el otro estado, aunque no pueda aceptarlo ahora mismo.
La imaginación es sensación espiritual. Ahora, toma un objeto. Ahora te guiaré con palabras. Toma una pelota de tenis en tu mano imaginaria, y siéntela. Tú puedes sentirla. Para mostrarte la diferencia, ahora toma una pelota de béisbol. ¿Puedes notar la diferencia entre las dos? Bueno, ahora toma una pelota de ping-pong. ¿Puedes notar la diferencia entre las tres? Si éstas no existieran, tú no podrías notar la diferencia.
Entonces, ¿cómo puedes decir que estas pelotas no existen, y luego decir que tú puedes notar la diferencia entre cosas inexistentes? En este momento, estas pelotas no existen para los sentidos externos de tu mente – claro que no. ¡Pero existen! Todas las cosas existen ahora en la imaginación humana. Ahí es donde tú lo has sentido; lo has sentido en tu Imaginación, y la Imaginación es sensación espiritual. Bueno, entonces, ¿qué significa? “Lo he visto en el ojo de mi mente, y he sentido los tres tipos de pelotas.” Bueno, entonces ¿qué significa?
Bueno, ahora hagamos la prueba. Toma esto y aplícalo a cualquier cosa en el mundo. Aplícalo a las montañas, aplícalo a lo que sea, y si tú aceptas lo que has hecho para probarlo, en tu Imaginación, tan solo espera. “La Visión tiene su propio tiempo señalado, ha de madurar, y florecerá; aunque demora, espérala, porque sin duda vendrá, y no se retrasará.” (Habacuc 2:3 – Traducción de Moffatt) ¡La visión vendrá a tiempo!
Déjenme que les cuente una experiencia de un amigo de hace unos meses – un hombre maravilloso – él es un ejecutivo en una agencia de comerciales muy prominente de Los Ángeles (él viene a todas nuestras reuniones). Aquí hay dos pequeñas historias; él cuenta: “Estaba conduciendo a casa, y luego me percaté de que el 15 de Abril se acerca, y necesitaba un poco de efectivo para pagarle al Tío Sam.” (Nota de la traductora: el Tío Sam se le dice a la Agencia de recaudación de Impuestos en Estados Unidos, la cual recauda los impuestos anuales el 15 de Abril de cada año)
Ahora, él es un hombre que recibe un enorme salario, pero a él le gusta gastarlo y vive una maravillosa y muy generosa vida. Él tiene una casa hermosa y tres hijos. Él mantiene una casa hermosa pero nunca piensa en términos de estos momentos en el año, en que somos confrontados con el Tío Sam y sus manotazos de ahogado, queriendo tomar una parte de lo que tú ganas. Bueno, tú no puedes decirle que “NO” a él, y debes pagarle. Así que aquí se está acercando el quince de abril, y a él le vendría bien obtener un poco de efectivo.
“Conduciendo hacia mi casa”, dice él, “esto es lo que hice. Yo simplemente imaginé, tan solo hice un juego al respecto. Me imaginé que estaba lloviendo suavemente, pero que la lluvia eran pequeños pedazos de papel verde. Era dinero viniendo gentilmente hacia mí, y yo podía sentirlo – realmente sentir la gentil lluvia de papel de dinero cayendo sobre mí, y luego paré. Hice esto por alrededor de dos o tres minutos, y luego, el tráfico demandaba de toda mi atención así que lo detuve ahí. Cuando llegué a casa esa noche, pensé que fue divertido y que lo volvería a intentar.
Yo podía sentir realmente cómo descendía sobre mí como una lluvia suave. Al día siguiente era el 14 de Abril, y sentándome en mi escritorio (sin prestar atención realmente) mi jefe entra y me dice: ‘Tú tienes un aumento de sueldo del 10 por ciento, y es retroactivo desde el primero del mes’, y me dio un cheque por el aumento del diez por ciento.”
Y él tiene un salario muy grande. Así que era el diez por ciento de un salario muy grande, y encima era retroactivo al primer día del mes – aquí, en cuestión de momentos, ¡su sentimiento fue concedido como un hecho real! Él no lo tenía antes de comenzar, y ahora lo tenía. Esta visión vino a florecer a su tiempo señalado. Él lo necesitaba para el 15 de Abril, y aquí, justo antes del 15, un hombre entra a su oficina con un cheque y le dice que es retroactivo desde el primer día del mes, al diez por ciento más de lo que había recibido el mes pasado.
Ahora, esta es una historia que tengo en casa, escrita con su propia mano. No me lo contó para que lo guarde en secreto. Él me lo contó, no en confidencia, sino para que la comparta con otros para alentarlos a que lo prueben. “Ahora”, él relata, “unos meses antes, yo fui a casa, y mi esposa comenzó a contarme una historia no muy agradable – no era agradable, en el sentido de que amábamos a esta pequeña niña. Ella tenía 14 meses de edad, y nosotros conocemos bastante a su abuela. Por supuesto que conocemos a su madre, pero somos más amigos de su abuela, y la abuela le dijo a mi esposa que la pequeña niña empezó a tener bultos en su cuello – pequeñas inflamaciones. Así que la llevaron al hospital para observarla. Hicieron una biopsia y cinco doctores trajeron el veredicto negativo de que eran malignos; de que era cáncer.”
Bueno, en un niño de 14 meses de edad eso es fatal, porque tú estás desarrollándote. Tú puedes detener al cáncer si tienes mi edad porque ya no te estás desarrollando – y se van de este mundo por otros medios – porque a mi edad, si me dijeran que tengo cáncer, no significaría que esa será la causa de mi futura separación de este mundo. Porque yo ya no me estoy desarrollando; yo ya estoy totalmente desarrollado. Pero una niña de 14 meses de edad se está desarrollando rápidamente, así que lo que sea que esté creciendo en su cuerpo se desarrollará rápidamente. Con cáncer, en muy poco tiempo se irán de aquí. Así que la abuela estaba asustada; la madre estaba asustada.
Pero mientras su esposa le contaba a mi amigo, él dijo: “Yo permití que su voz me contara algo completamente diferente. Ya había escuchado suficiente. Ella seguía hablando, pero no se dio cuenta por mi expresión que yo ya no estaba escuchando. No escuché una palabra más luego de que escuché lo que había dicho, e hice que ella me contara que toda la situación era falsa. Aunque había cinco doctores, y cada uno de ellos decía que esta cosa era maligna y que por lo tanto era fatal, yo dejé que se desvanezca por completo y traje a mi mente un veredicto completamente contrario.”
La abuela había pedido que se quedaran con la niña por un tiempo más en el hospital, para poder traer a otro doctor más. Así que, hicieron otra biopsia de una sección diferente del cuello. El sexto doctor que fue traído dijo: “Lo siento, estoy en desacuerdo con mis colegas, pero esto no es maligno y esto no es cáncer.”
Luego, llamaron a los otros doctores para hacer una tercera prueba, y ellos también confesaron haberse equivocado porque ella no podría haber tenido cáncer, y a día de hoy no tiene cáncer.
Mi amigo dijo: “No me voy a hacer problema por eso. Ahora la niña vive y no tiene cáncer. ¿Para qué voy a ir a decirles: No, ellos tenían razón la primera vez, pero la oración al único Dios que existe puede hacer todas las cosas posibles? Con Dios, todas las cosas son posibles, pero ustedes ni saben quién es Dios, así que ustedes creen en sus técnicas. Está todo más que bien.”
Él me dijo: “Ahora, mi esposa me dijo exactamente lo que yo ya sabía”. La abuela ahora se lo está contando a todo el vecindario, y ahora todos me ven como el hombre de los milagros – lo cual es desafortunado, porque me va a complicar la vida en el vecindario”. Y él continuó: “Yo no soy ningún hombre de los milagros; yo simplemente aprendí a través de ti, quién es Dios. Y si todas las cosas son posibles para Dios, y Dios es mi propia imaginación, ¿acaso no puedo imaginar lo que quiero imaginar y persuadirme a mí mismo de la realidad del estado imaginado? Bueno, lo hice, y ahora la niña es libre de lo que ellos llaman cáncer. Pero para justificar sus propias decisiones y no decir: bueno nos equivocamos. Ellos ahora dicen que nunca podría haber sido cáncer porque si no, ella no podría haber sobrevivido.”
Así que, aquí tienen esta historia que les acabo de contar, más la del aumento de salario, e innumerables cosas que este hombre ha vivido. A él no le interesa la Promesa. Bueno, eso está bien. Él es un hombre de negocios, y tiene que pagar el alquiler, tiene que comprar ropa para sus hijos y para su esposa y para él. Y él está más interesado en la Ley, entonces está siempre escribiendo estas historias respecto a la Ley. Si yo estoy semana tras semana hablando sobre la Promesa, yo sé que Dick esa noche no vendrá.
Bueno, a él no le interesa, pero está perfectamente bien, porque vivimos en el mundo del César, y debemos dominar la Ley, y no pasar la pelota y culpar a otros por las cosas que están sucediendo en nuestro mundo, porque en la casa de mi Padre hay muchas moradas. Me pone en mis dos pies para que aprenda a discernir, para convertirme en selectivo. ¿En qué morada entraré esta noche? ¿En qué estado de conciencia estaré esta noche? Porque si lo ocupara, aunque mañana me olvide, no será olvidado. He plantado la semilla, y con el tiempo – y a su debido tiempo – crecerá como cosecha. Ya sea que yo reconozca mi propia plantación o no, aparecerá en mi mundo. Así que, ¿por qué no dedicarnos un tiempo cada día para plantar cosas amorosas en este mundo?
La gente dirá: “Bueno, está bien – las espinas son reales, ¿no es así?” Oh sí, las espinas sí son reales, pero ¿no son las rosas reales también? ¿Deseas realmente salir a arrancar espinas – o rosas? Si voy a permanecer en las espinas, bueno, prefiero cambiarlo y dejarlo por las flores para el hijo del hombre. ¿Por qué no puedo pensar en término de rosas? No estoy negando que las espinas son reales. Las cosas que ven en los titulares, todas estas cosas, como: “Nixon declara la guerra”, o algo así, ¿por qué no pudieron contar esa historia de manera diferente? ¿Ya que en la mente del hombre la palabra ‘guerra’ tiene cierta asociación? Grandes titulares: “Nixon declara la guerra”, o algo así. Otro diario más discreto dice: “Nixon se hace cargo del asunto”, con esto, lo otro, y aquello.
Pero no, simplemente tenemos que asustar al lector para hacerle comprar el diario. Si él ha declarado la guerra, tú leerás la segunda línea en imprenta chiquita, porque si no tú pensarás que le ha declarado la guerra a Rusia. Así que, para eso es el Titular gigantesco, y luego lees de lo que se trata realmente, algún pequeño asunto.
Aquí, en la casa de mi Padre, hay innumerables moradas, innumerables estados de conciencia. Aprende a discernir entre el hombre y el estado en el que él está en este momento. Así que conoces a alguien y es un ser maravilloso, y en tus ojos él parece ser tan justo y honesto. Y otro individuo es deplorable. Pero cuando sabes que son solo estados, tú realmente verás que tú “no consideras ni al justo ni al malvado como el estado supremo, sino que son todos y cada uno de aquellos, estados del sueño, en los que el alma puede caer en sus sueños mortales del bien y el mal.” (William Blake, de “El Último Juicio”)
Así que, el que ahora es tan justo – quizás no sea consciente del hecho de que él se ha movido a ese estado literalmente, y por lo tanto es realmente un hombre justo, porque él tan solo está expresando el estado en el cual él se ha puesto a sí mismo. Pudo haberse puesto en ese estado deliberadamente, o por accidente. Si fue hecho deliberadamente: ¡fantástico! Entonces él sabrá salirse de él y continuar en todos los estados amorosos en este mundo. Pero si él cayó en ese estado, pareciendo ser un hombre justo, podría fácilmente salirse de él, y luego mañana leerás en el periódico que no era un hombre tan justo después de todo.
Así que, cuando sé que estos son tan solo estados… tú no salvas a los hombres, porque en cada hombre está Dios, y Dios en el hombre es su propia maravillosa Imaginación Humana. Pero si él no lo sabe, él dirá, como dice la mayoría de la gente: “Oh, tan solo es su imaginación. Eso no significa nada. No significa nada absolutamente. Puedo imaginar lo que yo quiera, porque yo no lo hice” – él, no sabe que lo va a hacer. Tú moras en una cosa por un largo tiempo y lo haces real, así que tú siempre estás volviendo a eso.
Te encuentras con cierta persona – luego de un tiempo, y está siempre hablando de cierto tema, y siempre vuelve a ese tema, y vuelve a ese tema una y otra vez. Él podrá estar hablando de la pobreza, y siempre hablando de la pobreza. Bueno, entonces síguelo. (Verás que) él mueve a su casa, mueve su trabajo – él mueve todo, porque el estado al cual constantemente estoy volviendo, constituye el lugar donde yo estoy morando. Así que sigo a mi Imaginación. ¿En dónde está morando la mayor parte del tiempo en el transcurso de un día? Ése es el lugar en donde yo estoy morando.
Bueno, tú puedes comenzar ahora, y por 24 horas morar en la seguridad – no en la seguridad del gobierno, porque… no. Tú la tienes, tú la has ganado, ya sea a través de tu talento o a través de alguna manera normal o digna. Tú no la has robado; tú la has conseguido de una manera maravillosa. Bueno, entonces tú moras en ese estado, y sientes cómo sería si fuera cierto. Porque verás: cuando el hombre estaba ciego, él enfatizó sobre una cosa, que, de todos los sentidos, pareciera ser el más fácil de aplicar: eso es sentir (tocar). Él dijo: “Acércate hijo mío, para que pueda sentirte.”
Él no podía verlo; estaba ciego. Él utilizó otro sentido también, llamado “olfato”. Él dijo: “Tú hueles y tú te sientes como a Esaú”. Esaú tenía pelo sobre todo su cuerpo. Quizás tú no puedas verlo, pero bajo el microscopio todos somos como monos, completamente cubiertos de pelo. Ahora, el otro no tenía pelo. Él es completamente subjetivo. Así que uno viene al mundo, cubierto completamente de pelo, y tienes una extensa descripción de un niño todo cubierto de pelo. ¡No tiene nada que ver con un pequeño niño que vino a este mundo cubierto de pelo! Se refiere al mundo externo, ya que eso (el pelo) es la cosa más externa del mundo.
Cuando lees que Juan el Bautista vino, y tenía una faja hecha de cuero y una chaqueta hecha de pelo, no se refiere a un hombre con una faja de cuero y un abrigo hecho de camello. Eso te dice que su historia es externa. Todo lo que él tiene para decir es completamente externo, como: “Tú no harás”. En otras palabras, no vino ni para comer ni para tomar, y su mundo entero era uno de prejuicios contra sus propios apetitos. Así que él sintió que al ser violento consigo mismo, podría ganar el Reino de los Cielos.
Luego se nos dice por medio del que no tenía pelo: “Cristo en ti es subjetivo”, y él dijo: “Todos aquellos nacidos de mujer, ninguno es mayor que Juan el Bautista; sin embargo, yo les digo, el que sea menor en el Reino, es mayor que Juan” (Mateo 11:11). Él era el mayor de todos. Él era puro sin medida, atentando contra sus propios apetitos. En su propia mente, él era un hombre justo y noble, pero: “el menor en el Reino es Mayor que él”, porque él representa el mundo externo.
Elías era Juan, quien era ‘Elías venido de nuevo’. Bueno, Elías se vistió a sí mismo con cabello de camello, y él también usó la faja de cuero, porque él representa a ese estado de la mente. Y tú encontrarás gente en el mundo que está tratando de entrar al Reino al atentar contra sus apetitos. Son vegetarianos estrictos. Son estrictos en esto y aquello, y realmente creen que deberían hacerse célibes, o entrar en alguna orden, para no ser trastornados, como muchos curas han hecho – y eso significa que ahora son ‘gente pura’. Puros de nada.